Introducción:

La inflamación y el cáncer son dos procesos complejos e interconectados que han sido objeto de una extensa investigación a lo largo de los años. La asociación entre la inflamación crónica y el desarrollo del cáncer ha sido bien establecida, y un creciente cuerpo de videncia continúa arrojando luz sobre la intrincada relación entre estos dos fenómenos. En este artículo, revisaremos algunas publicaciones clave que han contribuido significativamente a nuestra comprensión de la interacción entre la inflamación y el cáncer.

Hanahan D, Weinberg RA. Sellos distintivos del cáncer: la próxima generación. Celda. 2011
Marzo 4;144(5):646-74.

Esta publicación seminal de Hanahan y Weinberg introdujo el concepto de las “Características del cáncer”. Entre las características descritas, la inflamación se identificó como una de las características habilitantes que sostienen el desarrollo y la progresión del tumor. La revisión destaca cómo las células inflamatorias, las citoquinas y las quimiocinas contribuyen a varias etapas del cáncer, desde el inicio hasta la metástasis, fomentando un microambiente promotor de tumores.

Mantovani A, Allavena P, Sica A, Balkwill F. Inflamación relacionada con el cáncer. Naturaleza.
2008 Julio 24;454(7203):436-44.


Esta influyente revisión se centra en el papel de la inflamación en el cáncer y destaca cómo las células inmunes, particularmente los macrófagos asociados a tumores (TAM), dan forma al microambiente tumoral. Los autores discuten la dicotomía entre las funciones antitumorales y protumorales de las células inflamatorias, enfatizando la importancia de comprender los efectos dependientes del contexto de la inflamación en la progresión del cáncer.

Grivennikov SI, Greten FR, Karin M. Inmunidad, inflamación y cáncer. Celda. 2010 Marzo
19;140(6):883-99
.

En esta revisión exhaustiva, Grivennikov et al. profundizan en la intrincada relación entre el
sistema inmunológico, la inflamación y el cáncer. Discuten cómo las células inmunes y los
mediadores inflamatorios pueden suprimir o promover el crecimiento tumoral, dependiendo de la etapa y el contexto del tumor. La revisión también destaca el potencial terapéutico de
dirigirse a la inflamación para modular las respuestas inmunes antitumorales.

Colotta F, Allavena P, Sica A, Garlanda C, Mantovani A. Inflamación relacionada con el cáncer,
el séptimo sello distintivo del cáncer: vínculos con la inestabilidad genética. Carcinogénesis.
2009 Julio;30(7):1073-81
.


Este artículo de revisión propone la inflamación como el “séptimo sello distintivo del cáncer”, ampliando el concepto introducido en el artículo Hallmarks of Cancer. Los autores discuten el impacto de la inflamación crónica en la estabilidad genómica de las células y cómo el daño del ADN inducido por la inflamación puede impulsar la tumorigénesis. También exploran las posibles estrategias terapéuticas para atacar la inflamación para la prevención y el tratamiento del cáncer.

Balkwill FR, Mantovani A. Inflamación y cáncer: ¿de vuelta a Virchow? Lancet. 2001 Febrero
17;357(9255):539-45.


Este artículo de revisión clásico revisa el vínculo histórico entre la inflamación y el cáncer,
haciendo referencia a las observaciones de Rudolf Virchow hechas en el siglo 19. Los autores
discuten los mecanismos celulares y moleculares que subyacen al papel de la inflamación en la iniciación y progresión del cáncer, proporcionando información sobre cómo se entrelazan el cáncer y la inflamación.

Conclusión:

Las publicaciones revisadas en este artículo destacan el impacto significativo de la inflamación en el desarrollo y la progresión del cáncer. La inflamación crónica puede crear un microambiente promotor de tumores, que influye en cada etapa de la tumorigénesis, desde el inicio hasta la metástasis. La comprensión de la interacción entre la inflamación y el cáncer ha allanado el camino para el desarrollo de estrategias terapéuticas dirigidas a modular la respuesta inflamatoria para la prevención y el tratamiento del cáncer. A medida que la investigación en este campo continúa evolucionando, estos conocimientos fundamentales sin duda contribuirán a mejorar el manejo del cáncer y los resultados de los pacientes en el futuro.

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